El 21 de abril se llevó a cabo la Reunión anual de Tutores y Referentes de los Trabajos Comunitarios. Fue una instancia de intercambio de expectativas, inquietudes, dudas y experiencias en torno a este rol y la importancia que éste tiene para los objetivos de la Fundación.
Al culminar el ejercicio 2016, recibimos las evaluaciones de los Tutores de ese año. Compartimos una Evaluación realizada por un Tutor tras dos años de ejercer este rol en Chamangá:
“Todo parece indicar que se ha cerrado un ciclo de tutoría con S. y sentía la necesidad de enviarles estas líneas.
Evidentemente uno finaliza esta experiencia sintiéndose diferente persona.
Queda la satisfacción de constatar que con un modestísimo aporte de parte de quien juega este rol de tutor, se puede descubrir que tender apenas una mano es un gesto que se ve recompensado con una magnitud extraordinaria, solamente comparable con el de dispersar la semilla en un cantero que al poco tiempo nos sorprende totalmente florecido.
Creo que S. hoy ha crecido enormemente como persona, se ha capacitado y ha profundizado en sus talentos y especialmente en su vocación apasionada, con la que inició todo este proceso alcanzando resultados asombrosos.
Logró en tiempo récord, insertarse en el mercado laboral local y más sorprendentemente en el mundial lo que le permite ya hoy mismo tener los ingresos propios como para mantener una vida con opciones que le dan mayor libertad y haciendo lo que le apasiona, conectada a través de internet con personas que le hacen encargos motivadas por sus carpetas digitales.
Cuando la superposición de obligaciones, mantener dos carreras en paralelo, más las nuevas que surgieron como ofertas laborales, llevaron a que tuviera que suspender sus cursos de facultad, me quedó la grata sensación de que había comprendido, en una de nuestras últimas conversaciones como “tutor designado”, que la formación universitaria valía la pena continuarla, ya que le daría un complemento ideal para su desarrollo y crecimiento como profesional del arte y como persona.
Sentí que el micro mundo lleno de dificultades que encorsetaba sus aspiraciones, su situación familiar y sobre todo socio-geográfica fue traspasado en sus barreras más rigurosas y se abrió en posibilidades concretas al gran mundo que hoy reclama por jóvenes capaces de acceder a realidades y desafíos más allá de esas fronteras.
Pude seguir muy de cerca, como sabrán su proceso de formación y puedo dar certeza de que en poco tiempo yo ya no tendré absolutamente nada más que enseñarle en cuanto a las herramientas técnicas para desarrollar profesionalmente cualquier desafío. Su gran intuición autodidacta y su completa dedicación y disfrute por la formación que ha llevado adelante con gran autoexigencia, demuestran que ya ha alcanzado un nivel equiparable al de los mejores profesionales del medio. Sólo resta que vaya descubriendo con todas las herramientas en su poder sus mejores inspiraciones propias y las vista con su personalidad distintiva tal como lo logran los grandes artistas.
Espero que hayan evaluado positivamente también ustedes este proceso, para mí tan enriquecedor y sobre todo vertiginoso en cuanto a la magnitud y cantidad de cambios favorables que pude percibir en S. en este poco tiempo.
Les deseo siempre éxito en su gran tarea y que continúen con experiencias como ésta.
Fue muy enriquecedora, reitero para mí.
Sanopi”