Teléfono+598 2900 4360 / 098 917809email vocacion@fundacionchamanga.org.uy

Desde el año 2000 promoviendo
el desarrollo vocacional de nuestros jóvenes

Conociendo a José María Obaldía

0

El pasado 17 de abril realizamos la Reunión Mensual de Becarios, donde compartimos la entrevista realizada a José María Obaldía, a partir de preguntas elaboradas por los propios becarios y becarias de la Generación 2021 “José María Obaldía”.
Contamos con muy buena participación además de ex becarios/as y amigos/as de Chamangá que participaron de esta instancia, coincidiendo todos/as en la admiración a este hombre por su sencillez, humildad y sabiduría. Evidenciamos la importancia de estos encuentros intergeneracionales y el valor del testimonio.
Compartimos algunos comentarios de los becarios y becarias surgidos luego de escucharlo:

“Tal vez es todo esto nuevo que estoy viviendo, o lo identificada que me sentí con muchas cosas que dijo, o ambas, pero con su entrevista sentí como si un familiar me estuviera dando fuerzas para mantenerme vivaz, disfrutar del momento y no perder la esperanza.
Su humildad, visión de la vida y calidez hizo que me sintiera identificada con muchas de las anécdotas que contó (pude reafirmar, como usted mismo dijo, que la esencia es la misma, aunque transitemos tiempos diferentes) y logró que al final me encontrara conmovida hasta el punto de no poder hablar. Es para mí un honor inmenso pertenecer a la generación que lleva su nombre y voy a atesorar indefinidamente este momento en el que mi corazón se siente pesado por la alegría, la esperanza y la emoción. ” Flor, Ombúes de Lavalle.

“Me pareció muy importante y enriquecedora. Sin duda que se reflejan sus valores, como la generosidad, el respeto, la humildad. Como también sus ganas de aprender, y su ímpetu de trabajo, de superarse a pesar de todas las circunstancias que encontremos en el camino, de volcar en la sociedad ese saber, y por sobre todo su vocación. Gracias por tomarse este tiempo para nosotros y por dejarnos conocer su gran historia, que nos deja con ganas de continuar creciendo en torno a nuestra vocación. ” Lucía, Villa del Rosario

“La entrevista me gustó mucho, estuvo plagada de una carga emocional con la cual realmente me sentí identificado en diversas formas.Pero fundamentalmente me movilizó mucho escucharte decir que el camino de tu vocación surgió en respuesta a solucionar problemáticas concretas y no por un deseo vocacional. Creo que es fundamental hacer énfasis en que la “vocación” no es algo que viene de nacimiento, hay de alguna manera una construcción de la misma, sea en mi caso por el incentivo de mis padres de brindarme lecturas a edades muy prematuras y a darme siempre para adelante con lo que me gustaba o sea como en el tuyo que se construyó una vez ya habías caminado bastante dentro del “camino singular”, citándote con atrevimiento. Me pareció que tu ejemplo es tremendamente importante para la Fundación Chamangá y para todos los jóvenes que andan recorriendo su propio “camino singular” ya que muestra que no hay una única manera de ser vocacional.” Rafa, Young

“Particularmente cuando habla de los momentos amargos de su vida diciendo que por suerte fueron pocos, y que también muchos de ellos fueron endulzados por el tiempo, me llamó la atención. “El tiempo tiene esa virtud a veces” dijo. Y eso me transportó automáticamente a todos mis momentos amargos, pero ahora con la perspectiva de dejar que el tiempo entre y los endulce; recordar desde otro lado… esta entrevista significó mucho para mí.¡Gracias!” Betiana, Nueva Helvecia

“Sin dudas no podía dejar pasar la oportunidad de escribirle estas líneas y hacerle llegar un sincero “gracias”, gracias por abrirnos esa puerta hacia sus vivencias, sus experiencias y a su persona tan sabia como cálida; al escuchar sus palabras pude sentir que hablamos el mismo idioma, ese que se habla dentro del aula y tiene que ver con el quehacer docente; al igual que usted también tengo muy presente el día que al salir de la clase me dije “es por acá, esta es mi verdadera vocación” y sí, eso es algo que se define ahí, en ese “no sé qué” del aula, en la satisfacción de ver caritas atentas y curiosas, en las miradas cómplices, en la insaciable búsqueda de estrategias de enseñanza, en los cuadernos con orejas y lápiz borroneado… sabemos que hay algo en la labor docente que persiste a través de los años y poder encontrarlo en un persona como usted, me generó una gran emoción.
Gracias por compartir su historia con nosotros y hacernos saber que nunca es tarde para empezar, para enfrentar miedos e ir atrás de lo que uno desea. Me quedo con esa frase que dijo al final de la entrevista: “Adelante siempre hay algo”, y hacia allá vamos.” Belén, Young.

Comments are closed.